HECHO PÚBLICO/
por José A. Miranda
PROMUEVE
OFICIALÍA MAYOR, SEFIPLAN Y EL CIDE DIPLOMADO “GOBIERNO Y ALTA GERENCIA PÚBLICA”
A 45 FUNCIONARIOS DE LA ADMINISTRACIÓN
ESTATAL
Chetumal,
Q. Roo, 3 de octubre.- El Oficial Mayor de Gobierno Manuel Alamilla Ceballos,
en coordinación con la SEFIPLAN y el CIDE, inauguró este jueves en las
instalaciones del Centro de Convenciones y Negocios de la ciudad capital el
diplomado de Gobierno y Alta Gerencia Pública, en donde 45 funcionarios de la administración pública estatal acudirán
para actualizarse en tópicos como Diseño e Implementación de Políticas
Públicas, Nueva Gestión Pública, Sistema Nacional de Anticorrupción, y otros
temas contemporáneos de la administración pública, impartidos por el Centro de
Investigación y Docencia Pública (CIDE), la institución más importante de México
en materia de administración y políticas públicas, con la presencia de expertos y académicos de
reconocido prestigio nacional e internacional y gran trayectoria a partir del
viernes hasta el mes de diciembre.
Este
diplomado para el gobierno del estado nace con el objeto de entender mejor el
panorama de la administración pública en México, sus retos, nuevos alcances,
tendencias y sus mejores prácticas, buscando formar a funcionarios de primer
nivel en la toma de decisiones para que tengan las herramientas analíticas
necesarias que hoy en día son indispensables para todo servidor público en este
país, expresó, tras lo cual los asistentes al evento escucharon con gran
interés la conferencia magistral “ Las Políticas Públicas en un Sistema Federal
de Gobierno”, impartida por el Doctor Enrique Cabrero.
Al
término de esta conferencia el propio ponente invitó a los presentes a hacer
cuestionamientos acerca de los temas tratados en su disertación, entre ellos el
titular del Instituto Quintanarroense de la Juventud Fernando Méndez Santiago,
después de señalar que varios estados del norte han expuesto la posibilidad de
salirse del pacto federal, cuestionó el hecho de cada vez el gobierno federal
esté acaparando más recursos y afectando
a los estados, destacando que Q. Roo y Yucatán han expresado un alerta en
cuestión de recorte presupuestal con miras al 2020, así como otras entidades, para
orientarlo en programas que el gobierno federal considera prioritarios, sin
considerar a la visión local estatales y municipales. De qué manera podrían las
entidades y los municipios plantarse ante un gobierno federal con tanta fuerza
en lo político en lo popular, para poder defender los logros que han tenido en materia
de coordinación fiscal?.
ENTREVISTA AL DR. ENRIQUE CABRERO
ENTREVISTA AL DR. ENRIQUE CABRERO
En
su respuesta El Dr. Enrique Cabrero consideró muy interesante el tema.
Consideró el asunto como una herencia de la distorsión de la que todos formamos
parte, conclusión que hay que poner en la mesa. En realidad, consideró, el gobierno
federal no puede mover ni un milímetro el tema de las participaciones
federales. Si estas bajan, es porque hubo baja recaudación a nivel nacional. Si
la economía se detuvo, estamos prácticamente en crecimiento cero, bueno, la
recaudación bajó en una forma sensible, y al bajar, el pastel que se distribuye
por el sistema de coordinación fiscal disminuye de tamaño, y le toca menos a
cada entidad, pero allí hay una fórmula que se puede verificar donde a cada
entidad efectivamente le toca lo que proporcionalmente generó de ese ´pastel
presupuestal.
entre los asistentes del evento el único que hizo cuestionamientos al conferencista especializado en políticas públicas del gobierno fue el titular del Instituto Quintanarroense de la Juventud Fernando Méndez Santiago.
Evidentemente
las entidades que tienen una actividad económica más intensa, pues serán las
que tendrán una tajada mayor de los recursos, porque esa es la naturaleza del
sistema de coordinación fiscal. Entonces hay una parte de esa disminución,
porque estamos en una economía que no crece, y todos los niveles de gobierno lo
están sufriendo.
Hay
otra parte, aclaró, que es la de las aportaciones, que es un recurso que va a
los estados para los programas federales. Y evidentemente está allí en una
decisión de nivel federal. Disminuye el número de programas federales o incrementarlo, disminuir
los montos, y allí también están los estados
un poco atrapados en eso. Yo decía que esto es un producto de las distorsiones,
porque aunque las aportaciones han sido una buena idea, digamos, para
distribuir más rápidamente los recursos estatales a través de los gobiernos
estatales, éstos, a través de los años se han acostumbrado a este flujo de los
programas federales a través de las aportaciones, y si ahora el gobierno federal
decide que va disminuir el número de programas federales, no lo va a hacer a
través de las aportaciones, entonces los estados sufren, pero están sus
atribuciones, allí más bien lo que pasa es que los mal acostumbraron, el
sistema fiscal los mal acostumbró a las entidades federativas a que haya un
flujo sostenido, que si el seguro popular, bueno, tantas otras….Allí, yo digo,
que tenemos un asunto: más allá de presionar y negociar que no bajen los flujos
de las aportaciones tan drásticamente, yo creo que el aprendizaje para las
entidades federativas es que no podemos caer otra vez, en el futuro, en un
sistema en el que dependamos tanto de las aportaciones.
Y
el tercer punto, que es el siguiente más preocupante, es esto de la repartición
de los recursos de la venta de hidrocarburos, entre los gobiernos de los
estados. Esa fue siempre una práctica, digamos, muy poco sana. Todos los
gobiernos, de todos los colores políticos blancos la han adoptado, porque la
verdad, digámoslo como hay que decirlo, es el lubricante que tienen los
presidentes para que los gobernadores estén tranquilos. Pues, bueno, al final
hay va tu flujo de los excedentes del petróleo, y entonces ya, todo mundo
completa, y todo mundo está tranquilo, pero a la vez debes de estar quedando
bien conmigo como presidente, porque si no, capaz que no te toca. Eso sí es la parte más
discrecional de la distribución de recursos que ya venía siendo una distorsión.
Finalmente, expresó, cuando ya ese nivel de distorsiones empieza a ser
insostenible, teniendo los excedentes de los recursos del petróleo, se
distribuyen entre los estados, todo mundo la libraba, por así decirlo, y ya nadie
ponía el acento de la distorsión de base que hay en el sistema fiscal federal.
Ahora
el problema es que si bajan los recursos a distribuir, y si el presidente en
turno no los quiere distribuir, de la forma como lo hacía de ninguna forma, bueno,
entonces sí estamos en un problema todavía más grave, pero, pues,
evidentemente, eso también tiene difíciles soluciones. Yo creo que lo que están
haciendo los gobernadores en el norte, insisto, no está mal, no creo que sea
posible avanzar rápido en una separación del sistema de coordinación fiscal,
pero yo creo que sí está en sus manos insistir en el tema, ponerlo en la mesa
de discusiones y tratar de presionar a que haya un diálogo. Yo sí empujaría
mucho desde los partidos políticos, ojalá y todos, pero si no al menos de los
de oposición; insistir en una
conferencia nacional de federalismo, y de hacienda federal, eso le urge a este
país, no podemos seguir transitando con un sistema tan distorsionado, porque
eso, pues ahora se está viendo, que todo dependía en buena parte de las
voluntades de los presidentes en turno. Y si cambia la dirección, pues entonces
son mucho más endebles las entidades federativas.
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